Conferencia illbruck y ASEFAVE sobre la instalación y puesta en obra de cerramientos acristalados
Enric Gres, European Content Marketing Manager de Tremco CPG Iberia, mostró a los asociados de ASEFAVE las mejores prácticas para realizar un correcto y eficiente instalación y puesta en obra de los cerramientos acristalados en edificios residenciales o industriales.
Tremco CPG Iberia participó en el ciclo de conferencias online sobre rehabilitación en la construcción desde la Asociación Española de Fabricantes de Fachadas Ligeras y Ventanas (ASEFAVE), destacando, como valor clave en una rehabilitación, que los cerramientos acristalados tengan un correcto aislamiento acústico y térmico gracias al sellado de las ventanas y del envolvente del edificio.
Este aspecto, bien sabido por los países de la Unión Europea, ahora tiene el respaldo de los fondos Next Generation, que aportan nada más y nada menos que 1.100 millones de euros, des del el pasado febrero, y que se extenderán en el tiempo hasta diciembre del 2023. Las obras apoyadas con estos fondos deben realizarse antes de junio del año 2026.
El ponente representante de Tremco CPG Iberia, Enric Gres, European Content Marketing manager, destacó el sellado como un elementó básico en la instalación de la ventana, ya sea obra nuevo o rehabilitación, para conseguir un consumo del edificio casi nulo y de acuerdo a la normativa vigente. Pero, ¿Cuáles son los aspectos clave para conseguir este objetivo?:
Un producto mal aplicado o no adecuado a las necesidades de la obra afectará a la hermeticidad del edificio, su protección ante las condiciones climatológicas adversas, su confort térmico, nivel de humedad, a la presión del aire y, por último, a su ventilación. Además, para la hermeticidad del edificio también debe tenerse en cuenta su orientación, que puede afectar en gran medida las temperaturas exteriores. Todos estos factores afectarán al confort de las personas que estén dentro de este edificio.
Una infiltración de humedad puede dañar gravemente un edificio, ocasionando también una pérdida térmica y abriendo la puerta a un sinfín de patologías en el edificio. Esto conllevaría más costes de mantenimiento y, a la larga, una menor vida útil de la construcción.
Hay que tener en cuenta no sólo la resistencia contra la difusión del vapor de agua del soporte del cerramiento, sino también, como hemos dicho antes, su tipo de sellado para no empeorar el comportamiento de la ventana.
1) Protección exterior, mediante la estanqueidad al aire y al agua
2) Protección en la parte central de la ventana, permitiendo un aislamiento acústico y térmico
3) Protección interior, gestionando la permeabilidad al vapor de agua
illbruck ofrece múltiples soluciones combinables para conseguir las 3 barreras anteriores, que pueden verse pinchando aquí.
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