El sellado hermético es una de las técnicas más importantes en la construcción moderna. Aunque históricamente se ha priorizado la resistencia estructural y la estética, los avances en ciencia de materiales y sostenibilidad han demostrado que un sellado adecuado es esencial para garantizar la eficiencia energética, la durabilidad de los edificios y el confort interior. En este blog, exploramos las razones detrás de esta importancia, los desafíos técnicos que enfrenta, y cómo las soluciones líquidas como la gama illbruck están redefiniendo los estándares del sector.
El contexto de los edificios
En un mundo donde la sostenibilidad es una prioridad, los edificios no solo deben ser funcionales y estéticamente agradables, sino también energéticamente eficientes y respetuosos con el medio ambiente. Esto ha llevado a un cambio en los estándares de construcción, con un enfoque creciente en reducir el consumo de energía y las emisiones de carbono.
El concepto de "edificio hermético" se alinea con estas metas al reducir las fugas de aire y agua a través de la envolvente del edificio. Estas fugas representan una de las principales causas de pérdida energética y deterioro estructural, lo que afecta tanto el rendimiento como el costo operativo de una estructura.
La función del sellado hermético en la construcción
Un edificio hermético al aire y al agua cumple una doble función: protege contra las influencias externas y optimiza el desempeño interno. Las fugas de aire o agua pueden causar múltiples problemas:
- Pérdidas térmicas: El aire no deseado que entra o sale de un edificio reduce su eficiencia energética. Esto incrementa el consumo de energía para calefacción o refrigeración.
- Daños estructurales: La entrada de humedad no controlada puede comprometer materiales como madera, acero o concreto, acelerando su deterioro.
- Confort térmico y acústico: Las brechas en el sellado afectan tanto la temperatura interior como el aislamiento frente a ruidos externos.
- Cumplimiento normativo: Las normativas internacionales, como el Energy Performance of Buildings Directive (EPBD) en Europa, exigen estándares altos de hermeticidad para alcanzar metas de eficiencia energética y reducción de emisiones.
En esencia, el sellado hermético no es un lujo, sino una necesidad técnica y normativa para los edificios de nueva construcción.
Retos técnicos en el sellado de edificios
El concepto de hermeticidad plantea varios desafíos prácticos:
- Complejidad en las conexiones: Las zonas donde se unen materiales y elementos constructivos, como ventanas, techos y paredes, suelen ser puntos críticos. Las juntas mal ejecutadas son responsables de hasta el 70% de las fugas de aire en un edificio.
- Superficies irregulares: Las superficies rugosas o materiales porosos complican la adherencia y efectividad de las soluciones tradicionales como cintas y membranas físicas.
- Durabilidad y resistencia: Un buen sellado debe ser flexible para soportar movimientos estructurales sin fracturarse, pero también resistente a la humedad, rayos UV y otras condiciones ambientales extremas.
- Velocidad de instalación: En proyectos grandes o con plazos ajustados, se necesita una solución que combine rapidez con efectividad para evitar retrasos y costes adicionales.
Ventajas del sellado hermético para la sostenibilidad
Un edificio bien sellado no solo reduce las facturas energéticas, sino que también contribuye significativamente a la sostenibilidad global:
- Eficiencia energética: Según estudios de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), los edificios mal sellados pierden hasta un 30% de su energía a través de fugas de aire. Esto no solo afecta a la economía del usuario, sino que también aumenta las emisiones de carbono.
- Longevidad de los materiales: La ausencia de infiltraciones de agua reduce la aparición de moho y corrosión, prolongando la vida útil de los elementos constructivos.
- Conservación de recursos: Al minimizar reparaciones y renovaciones por daños estructurales, se reduce el consumo de materiales y energía asociados a estos procesos.
Tecnologías innovadoras para el sellado hermético
El desarrollo de soluciones líquidas para el sellado ha revolucionado el sector de la construcción. Productos como los incluidos en la gama de protección liquida illbruck (SP925, LD925, LD926 y OS925) destacan por su versatilidad y efectividad en aplicaciones tanto interiores como exteriores.
1. Beneficios clave de las soluciones líquidas:
- Adaptabilidad: Se aplican fácilmente en superficies complejas o de difícil acceso, como penetraciones de cables, conductos de ventilación y encuentros de paredes con techos.
- Continuidad del sellado: A diferencia de las membranas tradicionales, las soluciones líquidas ofrecen un sellado sin juntas, eliminando posibles puntos de fallo.
- Durabilidad: Forman una membrana elástica que resiste movimientos estructurales y condiciones extremas sin perder sus propiedades.
- Sostenibilidad: Están diseñadas sin disolventes ni sustancias nocivas, lo que las convierte en opciones ecoamigables.
2. Ejemplo de aplicaciones específicas:
- SP925: Ideal para conexiones alrededor de ventanas y sellado de anclajes al suelo. Su rápido curado en una hora permite avanzar rápidamente en el proceso constructivo.
- LD925 y LD926: Alternativas para aplicación en espray o brocha en interiores, útiles para conexiones pared-techo.
- OS925: Especialmente diseñado para impermeabilización exterior en sótanos y elementos en contacto con el suelo.
Normativas y certificaciones asociadas
El cumplimiento normativo es otro motivo por el que el sellado hermético se ha vuelto indispensable. En Europa, las normas como la ISO 9972 establecen métodos para medir la hermeticidad al aire de los edificios. Los certificados como Passivhaus exigen niveles de fuga inferiores a 0,6 renovaciones de aire por hora en condiciones de ensayo, lo que solo se logra con un sellado adecuado.
Por otro lado, los programas de certificación de sostenibilidad, como LEED o BREEAM, otorgan puntuaciones adicionales a los edificios que demuestran alta hermeticidad y eficiencia energética.
Casos de éxito en el uso de sellados herméticos
El impacto positivo de los sellados herméticos es evidente en proyectos de rehabilitación energética. Un ejemplo destacable es la renovación de un edificio en climas extremos, donde el uso de la gama de protección líquida illbruckredujo en un 35% las pérdidas de energía y garantizó una impermeabilización completa en ventanas, conexiones de techos y penetraciones de tuberías.